25 octubre 2009

LA INFORMACION NO TIENE QUIEN LA INFORME



Considero que los llamados
síndromes sin explicación médica en el que se engloban muchos padecimientos, algunos con etiqueta (migraña, fibromialgia, síndrome de fatiga crónica, síndrome de sensibilidad química múltiple, colon irritable, vulvodinia, cistitis intersticial...) y otros sin ella, son secundarios a una disfunción cerebral que yo denomino disfunción cerebral evaluativa y que equiparo a la disfunción evaluativa inmune, responsable de las alergias y enfermedades autoinmunes.

Las neuronas aparecen evolutivamente después que el sistema inmune pero comparten función y mensajería con él, actuando de forma absolutamente integrada.

"Las defensas" pueden estar excesivamente altas o excesivamente bajas.

Si pensamos exclusivamente en el sistema inmune como responsable de "la defensa" deduciremos que, en el primer caso (defensas altas), nos estamos refiriendo al problema de la alergia y las enfermedades autoinmunes y en el segundo el de las inmunodeficiencias (congénitas y adquiridas).

Probablemente no caemos en la cuenta, porque nadie nos lo ha hecho saber, que la red neuronal también participa en "la defensa", generando, al igual que su antecesor, el sistema inmune, estados defensivos altos o bajos.

Las defensas neuronales bajas se producen cuando la red neuronal del sentido del daño, las neuronas nociceptivas, quedan dañadas por diversas enfermedades (polineuropatías de fibra fina). Los estímulos nocivos no son detectados y los tejidos sufren todo tipo de agresiones sin que el individuo sienta dolor y, por tanto pueda defenderse. Serían estados equivalentes a la inmunodeficiencia adquirida. El equivalente congénito sería la ausencia congénita de dolor una entidad en la que fallan los factores de crecimiento necesarios para dotar al organismo de las neuronas del sentido del daño. La ausencia congénita de dolor impide el sufrimiento pero genera todo tipo de lesiones y mutilaciones por déficit de la función defensiva neuronal.

Los neurólogos no han construído la idea de una red neuronal nociceptiva (detectadora de daño) en estado de alerta excesiva, equivalente a la que genera la alergia y las enfermedades autoinmunes pero existen esos estados y son tan frecuentes y problemáticos como sus equivalentes inmunes.

El estado de "defensas excesivamente sensibles" puede implicar a la red inmune y/o a la neuronal. Su génesis no es bien conocida en los detalles pero sobreviene en el curso del proceso de aprendizaje que ambos sistemas desarrollan a lo largo y ancho de la vida, tratando de detectar señales que permitan detectar con antelación el agente o estado amenazante.

A todos nos han explicado en Biología el sistema inmune con sus dos brazos, el congénito y el adquirido (aprendido) pero no se nos explica que existe también el sistema defensivo neuronal con sus dos componentes; congénito y adquirido y que este segundo puede dar lugar a todo tipo de problemas, equivalentes a la alergia y enfermedades autoinmunes.

Creo que gran parte de las controversias se disolverían si tenemos en cuenta este hecho biológico básico: la existencia de una red neuronal defensiva que aprende a ver peligro y que actúa cuando cree que algo está amenazado.

Al no disponer de esa idea básica aparece, por un lado, el confuso mundo de "lo psicológico", "lo funcional", las somatizaciones y demás y por el otro el de las teorías que buscan exclusivamente en lo neuroinmunoendocrinológico o infeccioso-postinfeccioso los orígenes de la enfermedad, como reacción (comprensible) al empeño (infundado) de culpar a la psicología y ánimos del paciente todo el síndrome.

El aprendizaje del sistema inmune adquirido está condicionado por la experiencia adquirida con el contacto del organismo con bacterias, virus, hongos, parásitos y las lesiones que producen. Se genera así la cognición del sistema inmune, el conocimiento que determina la supervivencia (sensibilización) o eliminación de los clones de células inmunes responsables.

El aprendizaje del sistema defensivo neuronal asienta sobre experiencias adquiridas con estímulos térmicos, mecánicos, químicos y las lesiones que han generado. Se genera así la cognición neuronal, el conocimiento que la red defensiva neuronal aplicará para encender programas de alerta (p.ej. dolor).

El aprendizaje inmune no se beneficia, que sepamos, de lo que les sucede a otros individuos. Cada uno desarrolla su aprendizaje en solitario.

La red neuronal puede recoger señales del daño ajeno a través de todo tipo de sensores (se ha descrito recientemente la participación de las neuronas olfativas) y así construir cognición nociceptiva socializada sin tener que experimentar en propias carnes.

La información experta a través del lenguaje contribuye a generar cognición nociceptiva neuronal y alimenta los encendidos y/o apagados de la red. Todo ello se produce de forma inconsciente y sin necesidad de una autorización o un parecer favorable del individuo. Una vez construida una probabilidad de daño, la red opera y activa los programas correspondientes. A partir de ahí entra el individuo haciéndose preguntas y encontrando las respuestas que la red informativa facilita.

La información es lo que da sentido a las neuronas. No es posible entender el organismo y sus disfunciones sin considerarla. Los pacientes dudan de que "sólo hablando" podamos hacer nada o que la información sola pueda ocasionar todo el drama de la fibromialgia y síndrome de fatiga crónica. Es comprensible pero es un error que trae serias consecuencias.

Lo verdaderamente lamentable es la falta de concienciación e información en torno a esta fundamental cuestión biológica.

La información no tiene quien hable de ella aunque corren ríos de tinta emocionada,airada y desesperada sobre sus dramáticas consecuencias...

FUENTE : DT.ARTURO GOICOECHEA

Desarrollo de la comprensión científica y clínica de la FM.

RESUMEN: Nuestra comprensión de la FM ha logrado avances significativos en la última década. Los puntos de vista actuales ven la FM como resultado de un mal funcionamiento del sistema nervioso central que resulta en la amplificación de la transmisión y la interpretación del dolor.

Las investigaciones realizadas durante los últimos años han demostrado que los polimorfismos de los genes de los sistemas serotoninérgico, dopaminérgico y catecolaminérgico juegan un papel en la etiopatogenia de la FM. Varios estímulos externos, tales como infección, trauma y el estrés pueden contribuir al desarrollo del síndrome.

El manejo de la FM requiere de un enfoque integrado que combina modalidades farmacológicas y no farmacológicas.

La reciente aprobación por la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EEUU de pregabalina, duloxetina y milnaciprán como medicamentos para la FM puede anunciar una nueva era para el desarrollo de medicamentos con una mayor especificidad y la eficacia para la enfermedad.

A medida que aumenta nuestra comprensión de la base biológica y la contribución genética a la FM, esperamos comprender mejor la verdadera naturaleza de la enfermedad, clasificar mejor a los pacientes y conseguir mejor modalidades terapéuticas racionales.

Developments in the scientific and clinical understanding of fibromyalgia. Buskila D. Division of Internal Medicine, Department of Medicine H, Soroka Medical Center, Faculty of Health Sciences, Ben Gurion University, P,O,B, 151, Beer Sheva 84101, Israel. dbuskila@bgu.ac.il Esta dirección electrónica esta protegida contra spam bots. Necesita activar JavaScript para visualizarla . Arthritis Res Ther. 2009 Oct 14;11(5):242 PMID: 19835639


FUENTE : PLATAFORMA PARA LA FIBROMIALGIA Y EL SFC

Nuevo libro del periodista Miguel Jara: La Salud que Viene


Nuestro estilo de vida está generando nuevas enfermedades relacionadas con la contaminación ambiental. Además, se desarrollan otras patologías para aumentar los beneficios por la venta de vacunas y fármacos, entre otros productos. Es el negocio de crear temor para vender su tratamiento. Bajo estas premisas comencé las investigaciones que conforman este nuevo libro, La salud que viene: Nuevas enfermedades y el marketing del miedo (Península, 2009), que ahora les presento y que estará disponible en las librerías a partir del jueves 22 de octubre.

Hace algunos años, mientras rodábamos el documental Carga tóxica, sobre las sustancias químicas tóxicas que interfieren con nuestra salud, descubrí que, en los últimos años, miles de personas están perdiendo la salud por patologías que antes no existían o que permanecían latentes, como la Sensibilidad Química Múltiple, el Síndrome de Fatiga Crónica o la fibromialgia, entre otras muchas. Con posterioridad descubrí la electrosensibilidad o Hipersensibilidad a los Campos Electromagnéticos creados por antenas y teléfonos móviles, WiFi, líneas de alta tensión, transformadores eléctricos, etc. También tuve conocimiento del Síndrome del Edificio Enfermo y la lipoatrofia semicircular que ya se manifiesta en numerosos trabajadores de los modernos edificios de oficinas o la contaminación crónica por mercurio, entre otras.

De manera paradójica y en paralelo a este fenómeno asistimos a la invención o tráfico de enfermedades. Estaba escribiendo sobre esto y sobre la gran campaña de lobby y expansión del miedo entre la población como manera de hacer marketing en el caso de la vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) cuando comenzó a atisbarse en el horizonte el tsunami de la gripe porcina o gripe A. Sin duda este libro trata temas de plena actualidad pues tras su lectura se comprenderán los mecanismos de promoción de enfermedades, epidemias y pandemias que no lo son, de vacunas y vacunaciones innecesarias y peligrosas, de fomento del miedo en la sociedad y sus consecuencias, de la utilización de tecnologías peligrosas o comprometedoras de la salud y de la ocultación de los «efectos secundarios» de estas prácticas. El libro que he escrito ofrece muchas explicaciones sobre lo que estamos viviendo con el fenómeno de la gripe A, entre otros.

La primera parte de la obra versa sobre las enfermedades que la contaminación ambiental está expandiendo. Acostumbrados a vivir en entornos sintéticos, la población muestra, cada vez con más frecuencia, diferentes hipersensibilidades a los impactos tóxicos. Las personas que desarrollan estas sensibilidades son la punta del iceberg: lo que el futuro puede depararnos a todos. Armado con testimonios sorprendentes de las personas que padecen las enfermedades emergentes y una amplia y contrastada documentación, rastreo estas nuevas dolencias relacionadas con nuestro estilo de vida.

En la segunda parte se documentan enfermedades creadas por la industria farmacéutica y cual es el procedimiento que se sigue para ello. Se profundiza en las vacunaciones masivas, peligrosas e innecesarias a raíz del caso de la vacuna VPH o de las que contienen mercurio como conservante; se explica como poco a poco va introduciéndose en el mercado tecnología “espía” como la Identificación por Radiofrecuencias (RFID) o se promueve a espaldas de los ciudadanos la geoingeniería, una nueva «ciencia» para modificar el clima y «combatir» el cambio climático. Todos estas prácticas tienen en común la expansión del temor entre la población pero también el control social.

Les adjunto una entrevista que me hizo Susanna Griso en el programa de Antena3 Televisión Espejo Público la semana pasada que sirve como promoción del nuevo libro.




18 octubre 2009

Un retrovirus ¿responsable de la fatiga crónica?


7 millones de personas en el mundo sufren el llamado síndrome de fatiga crónica. También llamado en el pasado encefalomielitis miálgica, y para el que ahora se recomienda el nombre combinado EM/SFC (Encefalopatía Miálgica/Síndrome de Fatiga Crónica) es una enfermedad rara.

Su característica principal es sentir una gran fatiga y síntomas relacionados con ésta. Provoca, asimismo, un cansancio y dolor extremos durante el esfuerzo físico.Un padecimiento de origen psicológico que ahora, a la luz de un experimento, podría en realidad tener una procedencia vírica.

Es lo que ha publicado el Instituto Whittemore en la revista Science. Al parecer, se han hallado en un 66 % de muestras de enfermos un nuevo retrovirus, el XRMV. Un retrovirus humano que tiene similitud genética con el virus de la leucemia en ratones, descubierto inicialmente por el doctor Robert Silverman en la sangre de hombres con un defecto específico en su sistema inmunitario que les volvía incapaces para combatir infecciones virales y encontrado, asimismo, en pacientes con cáncer de próstata.

PALENCIA Afectados de fibromialgia exigen que la enfermedad se diagnostique más rápido

0 Comentarios | Comparte esta noticia »






  • Añadir a mi blog
  • guardar en mis favoritos de Del.icio.us
  • guardar en mis favoritos de Google Bookmarks
  • guardar en los favoritos de My Yahoo!
  • Enviar a Menéame
CerrarEnvía la noticia

Rellena los siguientes campos para enviar esta información a otras personas.






* campos obligatorios
Cerrar Rectificar la noticia

Rellene todos los campos con sus datos.




* campos obligatorios
Los afectados de fibromialgia sufren un dolor y una fatiga que afectan a su vida personal, familiar, económica, social y laboral, por lo que crecen las voces para que se reconozca a esta dolencia como una enfermedad.
Los que la sufren -la mayoría mujeres y con una media de edad de 45 años- siguen a la espera de que se cumplan sus reivindicaciones, por las que trabajan activamente, como el III Congreso Multidisciplinar de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica de Castilla y León, que se celebró ayer en el Centro Cultural Provincial de Palencia para analizar la enfermedad y sus repercusiones desde diferentes puntos de vista.
Asociacionismo
Una de las visiones de esta dolencia la aportó el especialista en antropología aplicada de la salud Alfonso Aparicio Mena, que disertó sobre 'Lo social como elemento de reequilibrio en personas con fibromialgia'.
También la médico de familia del centro de salud de Frómista, Zenaida Bolívar, aportó a los asistentes al congreso una perspectiva de la fibromialgia desde la óptica de la medicina de familia del medio rural.
El asociacionismo tampoco faltó en este tercer congreso, con una conferencia de la presidenta de la Confederación de Federaciones de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica de España, Mar Urruti.
El objetivo de las reuniones congresuales, como la celebrada ayer en Palencia, pasa por proporcionar a los afectados un mayor conocimiento de la enfermedad. Por su parte, la presidenta de la asociación palentina, Pilar Fernández Ortega, recordaba que se ha elevado al Ministerio una petición para que elabore una guía clínica que ayude a los profesionales en el diagnóstico de la enfermedad, que suele tardar en ser reconocida y obliga a los afectados a deambular de unos a otros médicos.

Aditivos Alimentarios: El papel del glutamato en la fibromialgia

Un exceso de este neurotransmisor en el cerebro podría alterar la percepción del dolor persistente en músculos y articulaciones

La fibromialgia es un problema de salud cada vez más frecuente, pero de origen todavía incierto. Las líneas actuales en la investigación de esta enfermedad se centran en la posible relación con la concentración de glutamato en el cerebro. Los resultados señalan que en una cantidad excesiva puede ser tóxica. Este desequilibrio altera la comunicación correcta entre neuronas -células nerviosas-, que distorsiona la percepción y modifica el umbral del dolor, síntoma principal de la enfermedad.


La investigación del glutamato como causa del dolor en la fibromialgia ha despertado la curiosidad y el interés de la comunidad científica. Un estudio reciente que analiza su influencia en el dolor relacionado con esta patología concluye que los pacientes con fibromialgia tienen niveles mayores de este neurotransmisor en algunas regiones del cerebro.

¿Qué es el glutamato?

El glutamato es un aminoácido, una de las piezas básicas para la vida y que configuran, sobre todo, las proteínas. Los aminoácidos se unen entre ellos y forman una cadena que se pliega sobre si misma hasta constituir una proteína funcional. Sin embargo, no todos son proteicos, ya que con frecuencia desempeñan otras funciones metabólicas. Éste es el caso del glutamato, que también actúa, en su forma libre, en numerosas vías metabólicas.

Es un precursor de otras moléculas, tales como los ácidos nucleicos (ADN). A su vez, sirve como fuente energética para muchas células de la mucosa intestinal y del sistema inmunitario, participa como transportador de nitrógeno entre diferentes órganos y desempeña un papel fundamental en las sinapsis (comunicación) de las neuronas. En relación con la fibromialgia, su actuación en el desarrollo de la patología está determinada por su función como neurotransmisor, moléculas orgánicas que transmiten información a través de las neuronas, en un proceso denominado sinapsis.



Una neurona se excita y libera el neurotransmisor al exterior de la membrana de su axón terminal, de modo que la siguiente neurona lo detecta gracias a unos receptores situados en sus dendritas, se excita y transmite el estímulo a la siguiente neurona. El proceso se repite de manera sucesiva. El cerebro es capaz de enviar información a todo el organismo y, gracias a una compleja red de neuronas, tiene memoria.

Más glutamato, más dolor

En la investigación, titulada “Incremento de los compuestos de glutamato en el cerebro de los pacientes con fibromialgia: un estudio mediante resonancia espectroscópica”, participaron 60 mujeres, 30 de ellas afectadas de fibromialgia, cuyos cerebros se examinaron mediante resonancia espectroscópica. El objetivo fue analizar las principales estructuras cerebrales: la corteza prefrontal, el tálamo y las amígdalas de ambos hemisferios. El glutamato participa en la transmisión de los estímulos de las terminaciones nerviosas de modo que, según los autores, un exceso provoca una disfunción neuronal que conlleva un mal funcionamiento del sistema nociceptivo (que percibe el dolor).

Las conclusiones defienden que los niveles altos de compuestos de glutamato en el tálamo izquierdo están relacionados con la intensidad del dolor y la sensación de fatiga. Los investigadores hallaron también una alta concentración de otro compuesto denominado Inositol (Ins) en ambas amígdalas. Éste es un componente fundamental de las membranas cerebrales y participa en el sistema nervioso, por lo que se asocia a la percepción del dolor.

Pero las indagaciones sobre el glutamato y la fibromialgia no terminan aquí. Un estudio realizado en EE.UU. y publicado en la revista “Arthritis and Rheumatism” relaciona la enfermedad con los niveles del neurotransmisor de una región cerebral conocida como ínsula. Los científicos de la Universidad de Michigan utilizaron espectroscopia de resonancia magnética por protones y hallaron que el glutamato de esa región era la causa de su sobreexcitación. Por este motivo, redujeron los niveles de glutamato en los pacientes afectados y constataron que el dolor decrecía. Ambos descubrimientos abren las puertas a un nuevo mercado de fármacos y a nuevas líneas de investigación para el tratamiento de esta dolencia.



CONDIMENTO ALIMENTICIO

El glutamato se utiliza también como condimento alimenticio. Es un aditivo autorizado que se usa como conservante y saborizante en muchos alimentos salados, platos preparados (como sopas de sobre), cubitos de caldo, aliños para ensaladas, mezclas de especias y precocinados (pizzas, canelones y lasañas). El glutamato monosódico (E-621) es un potenciador del sabor que actúa sobre unos receptores específicos de la lengua y que otorga a los alimentos un gusto especial denominado umami, que significa “gusto sabroso” en japonés. Su sabor es similar al de la carne.

A pesar de que se le atribuye un efecto negativo en la salud de personas sensibles al aditivo, numerosas investigaciones han llegado estos últimos años a la conclusión de que el glutamato es seguro y práctico como condimento. Incluso, al encontrarse de manera natural en alimentos frescos, se ha determinado que no es necesario establecer un consumo máximo diario. Esta reacción, conocida como “síndrome del restaurante chino”, es habitual en personas que comen de manera habitual platos orientales, más por ser ricos en marisco, frutos secos, especias y hierbas, que por el propio glutamato en sí.

Ofrecen en Calp cursos de relajación para enfermos de fibromialgia

La Concejalía de Bienestar Social ha puesto a disposición de la Asociación de Fibromialgia y Fatiga Crónica de Calp, el Aula Pedro Pastor, situada frente consistorio, para que la organización imparta allí clases de Chi- Kung y de Reiki, orientadas a tranquilizar, relajar y crear un mayor bienestar al organismo de este tipo de enfermos. Las actividades elegidas reportan grandes beneficios a los afectados por las citadas enfermedades, según señalan desde la propia asociación.

Los cursos son de carácter gratuito, y están abiertos a todo tipo de público.

El taller de Chi-Kung, que consiste en ejercicios tradicionales chinos para armonizar la energía, combina movimientos de las artes marciales, con concentración y regulación de la respiración. Las clases dan los días jueves a partir de las 19 horas.

Por su parte el taller de Reiki, que forma parte de las técnicas que usan la energía para curar., se celebra los sábados, a partir de las 16 horas.

La Asociación de Fibromialgia y Fatiga Crónica de Calp tiene su oficina de atención al público en el Casal de las Asociaciones ubicada en la plaza de la Constitución, junto al Punt Jove. Atiende los días lunes, a partir de las 19 horas. Hortensia Romera, de la directiva de esta organización asegura que pertenecer a esta asociación “reporta un gran beneficio psicológico a los enfermos de estas enfermedades, ya que comparten experiencias y novedades”.

La Fibromialgia y el Magnesio

Molécula de Cloruro de Magnesio

La Fibromialgia es una condición caracterizada por la propagación de dolor en las articulaciones, los músculos, los tendones y otros tejidos blandos. Algunos de los problemas que comúnmente se asocian a la fibromialgia son: fatiga, rigidez en las mañanas, problemas de sueño, dolores de cabeza, entumecimiento de manos y pies, depresión y ansiedad. La fibromialgia puede desatarse por sí sola o puede aparecer como secundaria a otras condiciones musculoesqueléticas como artritis reumatoidea o lupus sistémico.
El magnesio no es remedio, lo que sí es un alimento sin ninguna contraindicación y compatible con cualquier medicamento simultáneo.
Las propiedades benéficas del Magnesio para la fibromialgia son:
La fibromialgia, una alteración recientemente reconocida es una causa común de fatiga y dolor músculo esquelético. Ello se deriva de un desequilibrio de la relación calcio- magnesio con disminución de este último electrolito. La adición de magnesio en dosis compensadas de dos cásulas de 800 miligramos /dia del producto FMKVII de RDG alivia notoriamente este trastorno.(Kinast & Cols)
Un estudio clínico demostró que un complemento alimenticio diario de 600 miligramos de magnesio produjo una tremenda mejoría en el número y la severidad de los puntos sensibles (Abraham G, Management of fibromyalgia: Rationale for the use of magnesium and malic acid. J Nutr Med 3, 49-59, 1992).
La fibromialgia, una alteración recientemente reconocida es una causa común de fatiga y dolor músculo esquelético. Un estudio clínico demostró que un complemento alimenticio diario de 600 miligramos de magnesio produjo una tremenda mejoría en el número y la severidad de los puntos sensibles (Abraham G, Management of fibromyalgia: Rationale for the use of magnesium and malic acid. J Nutr Med 3, 49-59, 1992).
Muchos pacientes con síndrome de fatiga crónica tienen niveles bajos de magnesio. En el Reino Unido se realizó un estudio clínico, doble-ciego, controlado con placebo para valorar el efecto de los complementos alimenticios de magnesio en el síndrome de fatiga crónica. Al final del estudio, el 82 % de los pacientes que recibieron el magnesio como complemento, mostraron una mejoría importante en los niveles energéticos, mejor estado emocional y menos dolor (Cox IM, Campbell MJ and Dowson D, Red blood cell magnesium and chronic fatigue syndrome. Lancet 337, 757-760, 1991). El efecto benéfico generalmente se nota después de 4 días y casi siempre, si se sigue el tratamiento por lo menos 6 semanas; la fatiga no regresa después.
El sistema nervioso queda totalmente calmo sintiendo mayor lucidez, Combate el insomnio reanima los órganos de las funciones vitales (glándulas) el ácido úrico se deposita en las articulaciones del cuerpo especialmente en los dedos que se hinchan es porque los riñones están fallando por falta de magnesio (revisar los riñones, por sí acaso existen problemas mayores). DOSIS: una dosis (2 tabletas) por la mañana y otra por la noche. Después de curado continuar con la dosis preventiva: una dosis (2 tabletas) por la mañana en la artritis, descalcifica hasta la membrana de las articulaciones y ataca la esclerosis calcificada para evitar infartos, purificando la sangre, El magnesio (Mg) es el cuarto catión intercelular más importante del cuerpo, tiene un papel fundamental en la contracción y la relajación muscular mantiene los huesos, articulaciones, cartílagos y dientes en buen estado, Asimismo, el magnesio disminuye la absorción del colesterol alimenta a los sistemas nervioso, muscular, neuromuscular y glandular y, consecuentemente, combate los efectos del estrés, la hiperexcitabilidad neuromuscular
Una correcta administración de magnesio elimina muchas posibilidades de tener alguna de estas dolencias: hipertensión, artritis, artrosis, arterioesclerosis
La deficiencia de magnesio provoca irritabilidad muscular y nerviosa, debilidad, cansancio, fatiga, depresión, falta de ánimo, hipertensión vitaliza el cerebro devuelve y conserva la juventud hasta la edad avanzada El magnesio es de todos los minerales, el más indispensable, Tomar magnesio para una enfermedad determinada, equivale a reorganizar todo el organismo, consiguiendo de esta forma una cura integral.


PARTE CIENTIFICA ADICIONAL
Información adicional del Ing. Urbano Aguilar Miranda Maestría en ciencia químicas, síntesis y productos naturales, nombrado Investigador Nacional por el Gobierno de México en 1987 y pionero del conocimiento y divulgación de las bondades del clorumag en México).
. Hemos encontrado cientos de artículos científicos sobre estudios de aplicaciones del clorumag en todo el mundo, científicamente comprobado en enfermos de clínicas y hospitales.La deficiencia de magnesio nos puede llevar a una elevación de la presión sanguinea.

Fuente: Fibromialgia y Medicina Naturista

El consumo ligero de vino tinto aporta beneficios en enfermos de fibromialgia


El consumo ligero de vino tinto, previa supervisión médica, aporta beneficios en enfermos de fibromialgia, según una tesis realizada por investigadores de la Universidad de Extremadura (UEx), que ha desvelado los efectos positivos que tiene la ingesta en pequeñas dosis de vino tinto para esta enfermedad.

Según informa la UEx en su página web y recoge Europa Press, la directora de la tesis, María Victoria González López-Arza, explica que el estudio se ha llevado a acabo con "80 mujeres afectadas por esta enfermedad" y ha demostrado que "40 de ellas mejoraron los síntomas tras someterse voluntariamente a este proyecto e ingerir durante cuatro semanas, 105 gramos de alcohol semanales procedente de vino tinto".

Los enfermos pudieron apreciar una disminución "muy significativa" de los puntos sensibles al dolor y los estados de tristeza. Además "mejoraron" los niveles de ansiedad y depresión.

Así mismo, destaca que "numerosos" estudios médicos avalan en las últimas décadas los efectos beneficiosos que el consumo responsable y moderado de vino tinto tiene en el organismo. Los polifenoles, uno de los componentes que podemos encontrar en esta bebida, son los responsables de este aporte beneficioso, pero hasta ahora no se había demostrado que tuviese efectos positivos en estos pacientes.

Sobre la fibromialgia, la universidad extremeña explicó que es un proceso reumático crónico, con dolor intenso generalizado y persistente al que hay que añadir alteraciones en el sueño, ansiedad y depresión, y que afecta entre el 2 y el 4 por ciento de la población mundial, y en el 80 por ciento de los casos a mujeres.

La tesis que desvelado los efectos positivos de la ingesta en pequeñas dosis de vino tinto para esta enfermedad se llevó a cabo en el Departamento de Enfermería de la UEx y ha sido realizada por expertos pertenecientes al grupo de investigación de la UEx Adolor entre los que se incluye el autor de la tesis, José Vicente Triviño Palomo, licenciado en Enología, y el codirector de la tesis, Juan Diego Pedrera Zamorano.

El grupo de investigación Adolor está especializado en el manejo del dolor crónico benigno con medidas no farmacológicas; fundamentalmente la fisioterapia, acupuntura, y en este caso el vino, considerado como elemento incluido en la dieta mediterránea.

10 octubre 2009

Lágrimas de dolor

Juana Gallar encabeza el equipo que ha llevado a
cabo este estudio desde el Instituto de Neurociencias
CRISTINA DE MIDDEL

Un estudio pionero de Neurociencias descubre que la sequedad en los ojos está asociada a la fibromialgia.

Un equipo del Instituto de Neurociencias ha sido el primero en relacionar la fibromialgia con el conocido popularmente como síndrome del ojo seco. Según este estudio, que acaba de publicarse en una prestigiosa revista científica, el 80% de las personas que sufre fibromialgia, también padece sequedad en el ojo, y tiene impedida en gran medida la facultad de generar lágrimas en cantidades normales.
La investigadora principal Juana Gallar, que trabaja en el Instituto de Neurociencias, centro ubicado en el campus de Sant Joan y perteneciente a la Universidad Miguel Hernández y al Consejo Superior de Investigaciones Científicas, señala que han podido describir cómo existe una interrelación clara entre la fibromialgia, que todavía no está catalogada como enfermedad, y esta afección ocular.
"Los que sufren fibromialgia tienen razones para quejarse de molestias oculares y, posiblemente, se quejen menos de lo que deberían. Hemos visto que la mayoría tiene la sensibilidad del ojo alterada y apenas producen lágrima. Y en esas ocasiones, cuando se tiene ese síndrome de ojo seco, la sensación de incomodidad es tan grande que molesta, incluso, parpadear. Esto reduce mucho la calidad de vida", explica la investigadora principal.
El trabajo científico, que se ha hecho conjuntamente con el Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología de Bilbao, ha sido posible también gracias a la colaboración de la Asociación de Fibromialgia del País Vasco.
En total se trabajó con una población de 38 pacientes que padecía fibromialgia y con otro grupo de personas que no la sufrían.
Los investigadores constataron a través de este estudio que mientras una persona sana genera entre 20 y 40 milímetros de lágrima, con una media de 30; los afectados por la fibromialgia producen entre 1 y 27 milímetros, con una media de 10, lo que supone una disminución de líquido lagrimal considerable.
Juana Gallar, que comparte esta investigación con otros científicos como María del Carmen Acosta y Carlos Belmonte, además del grupo de especialistas de Bilbao, recuerda que la córnea es la parte del cuerpo humano con mayor número de receptores sensoriales y, por tanto, es la más sensible en general, sobre todo al dolor, más incluso que los dientes.
En la literatura científica éste es el primer estudio que relaciona la alteración de la sensibilidad ocular con una disminución de la producción de lágrima en estos enfermos.
"Hasta ahora no se había estudiado la asociación entre la fibromialgia, la sensibilidad ocular y el ojo seco", señala la investigadora principal, cuyo equipo, el de Neurobiología Ocular, se dedica al estudio de los mecanismos por los que se produce el dolor, usando como modelo la córnea del ojo.
Este equipo investiga, mediante técnicas electrofisiológicas y estudios psicofísicos, las características de las neuronas sensoriales que dotan de sensibilidad a la superficie anterior del globo ocular.

Fuente:Diario Información

Identificado un virus relacionado con el síndrome de fatiga crónica

Los científicos creen que el patógeno se transmite por vía sexual.

Se lo conoce por las poco atractivas siglas XMRV, que corresponden con el no menos atractivo nombre de virus xenotrópico de la leucemia vírica murina, pero 17 millones de personas en el mundo van a estar muy pendientes de lo que de él se diga en el futuro. Son los afectados por el síndrome de fatiga crónica, una enfermedad de la que se conoce claramente su principal síntoma (un cansancio que puede llegar a ser muy discapacitante), pero no su cura ni su causa. Ahora, el XMRV pasa a encabezar la lista de posibles sospechosos de provocar ese agotamiento, por delante de congéneres como el virus del herpes o el de Epstein-Barr. El hallazgo ha sido publicado en Science.

El trabajo, sin embargo, es muy preliminar. Se trata de una relación estadística (se ha hallado el virus en un 67% de las personas con fatiga crónica, frente a sólo un 4% en quienes no lo tienen). Los investigadores del Whittemore Peterson Institute de Nevada admiten que no han sido capaces de describir el posible proceso entre el patógeno y la enfermedad.

El XMVR es un retrovirus. Esto quiere decir que tiene la capacidad de ocultar su código genético integrándolo en el de las células que infecta (como hace el VIH que causa el sida, por ejemplo). Los médicos ya le habían echado el ojo, pero por otra causa: también se asocia con el cáncer de próstata.

Este tipo de microorganismo necesita un contacto estrecho antes de transmitirse de una persona infectada a otra sana. Por eso parece que la vía sexual es la más probable.

fuente:El pais.com

05 octubre 2009

FIBROMIALGIA PERIFERALISMO Y CENTRALISMO


Hay evidencia de que en la fibromialgia y otras enfermedades afines existe un estado de hipersensibilidad en los sensores musculares de daño. De este modo cualquier estímulo irrelevante genera falsa señal de nocividad que induce al cerebro a encender los programas defensivos de dolor o fatiga. Esta hipersensibilidad no se acompaña de daño objetivo en los músculos ni de aumento en metabolitos ácidos o ATP. Es decir, los sensores de ácidos y ATP están hipersensibles y descargan señal de daño a pesar de que los niveles de las moléculas sensadas son normales.


La alarma de incendios salta porque los sensores de humo o altas temperaturas han descargado en ausencia de humo y altas temperaturas. Lógicamente, el servicio de extinción de incendios se pone en marcha a pesar de que se trata de una falsa alarma.


La pregunta lógica es: ¿qué hace que los sensores de daño estén hipervigilantes?


La respuesta más honesta es: no se sabe.


Desde esta posición de ignorancia confesada caben dos propuestas:


1- Aunque no se sepa el origen, es un hecho que existe una situación anómala de sopreproducción e hiperexcitabilidad de sensores de daño. Una determinada genética y focos de sobrecarga física y emocional actuales y/o pasados generarían la alteración. El ejercicio potenciaría el problema ya que la actividad muscular generará trenes de señal (falsa) de nocividad.


Los centros de procesamiento de señal de daño estarían secundariamente sensibilizados por la continua llegada de información sobre nocividad. El cerebro estaría hipervigilante como reacción a la falsa información.


Esta es la posición periferalista, muscular.




2- No se ha demostrado ninguna alteración objetiva muscular de forma consistente y el estado de hipervigilancia de los sensores sería secundario a un encendido central, cerebral, de la alerta. Esta hipersensibilidad central estaría facilitada o determinada por factores cognitivos y emocionales.

Esta es la posición centralista.


En mi opinión el sistema nociceptivo (detección de daño actual y/o potencial) se activa en su conjunto. No es imaginable una situación en la que los sensores estén activados y el cerebro mirando para otro lado o, al revés, el cerebro preocupado y los sensores apagados.

La información fluye de abajo arriba y de arriba abajo. A veces encienden la mecha los sucesos (daño muscular consumado) y los metabolitos ácidos y ATP disparan los sensores correspondientes haciendo saltar el dispositivo general. En otras ocasiones es el cerebro el que sobredimensiona el peligro y eso se traduce en la activación preventiva de los sensores, aun en ausencia de señales de daño consumado o inminente.

La impresión que se recoge en los trabajos sobre fibromialgia es que se pasa por alto la función predictiva. Si el cerebro codifica peligro, aunque sea erróneamente (tal como sucede con el sistema inmune y las enfermedades autoinmunes) el sistema se activa.

El cerebro puede frenar o estimular las respuestas periféricas. Cuando se produce una incidencia de daño agudo colabora en el encendido explosivo del sistema nociceptivo para pasar, tan pronto como lo permita el estado de los tejidos dañados y según los contextos, a regular y aflojar la presión vigilante.

En la fibromialgia el cerebro actúa como si algo estuviera poniendo en peligro la integridad muscular o como si se quisiera evitar, preventivamente, su trabajo. Se trata de una evaluación errónea de peligro. Ese es, en mi opinión, el problema central. Los hallazgos periféricos de sensores ácidos y purinérgicos sobreproducidos e hiperexcitables, los niveles elevados de sustancia P y descendidos de serotonina, etc, son marcadores del estado de alerta nociceptiva inducido por la evaluación cerebral de peligro.

El cerebro trabaja desde falsas creencias de daño potencial y promueve conductas defensivas apretando las tuercas del dolor y cansancio. El paciente puede obedecer o resistirse al requerimiento cerebral. El cerebro actuará en consecuencia.

Cerebro no es sinónimo de individuo consciente ni se presupone un origen psicológico.

El procesamiento de información es una función somática. El procesador (red neuronal) puede estar sano pero puede procesar información errónea, por muchos motivos. Puede que no estemos haciendo bien los deberes a la hora de proveer al cerebro de los datos adecuados...

04 octubre 2009

¿Por qué dicen que la Gripe A es una crisis sanitaria cuando no lo es? ¿Cuál es la crisis sanitaria?

Para mí, la pregunta principal en este momento es: "¿Por que ahora están intentando decir que hay una crisis y una pandemia de la Gripe A cuando no la hay?".
Sí, tenemos una crisis sanitaria, pero no tiene que ver con el virus de la gripe A. Tiene que ver con otros temas como la privatización de la sanidad, y también una crisis que tiene que ver con desigualdades, exclusión, los beneficios de las farmacéuticas y otros temas.
No hay una pandemia de la gripe A. La OMS ha cambiado la clasificación de la categoría "pandemia" esta primavera (¡qué casualidad!), que antes se refería al número de infectados en X número de países simultáneos con X número de muertes. Ahora "pandemia" se refiere sólo al número de países en los cuales hay infecciones sin muertes necesariamente.

Los países del sur acaban de pasar por el invierno y no ha habido pandemia de Gripe A, países con niveles de pobreza que favorecen el contagio. No ha sido un problema.(Cf. Le Journal du Dimanche, 25 de julio de 2009): "Debré: ‘Cette grippe n’est pas dangereuse’"; cf. La Razón (4 de septiembre de 2009): "Rodríguez Sendín: Cordura frente al alarmismo en la prevención de la gripe A)".

Entonces, si no hay una pandemia ni una crisis sanitaria en relación con la Gripe A, ¿por qué todo este revuelo?
Hay que tener en cuenta que el poder actual es un adicto a las "crisis" (ver Fox NEws Channel) para mantener a la gente asustada y controlada. Las palabras, la retórica y el miedo, son el primer pero completamente necesario paso en cualquier proceso de camelar a la gente para que traguen cuestiones como: privatización del sistema sanitario, el trato favorable a las farmacéuticas (todo el mundo a vacunarse), mover la gran cantidad de Tamiflu que Mr Rumsfeld y amigos necesitan vender y que está caducando en los almacenes desde la "crisis aviar", etc.
Y, en general, esta crisis es para que los ciudadanos que están empezando a tomar conciencia de la real crisis sanitaria (recortes en servicios, privatización, problemas de salud sobre todo relacionados al medio ambiente, etc), para callarlos y despistarlos.
(Ayer fui testigo de ciudadanos que no se despistan en un acto de presentación de mi documental sobre el Síndrome de Fatiga Crónica, en el barrio de Poble Nou en Barcelona: una mujer con fibro-SFC-SQM se levantó y dijo: "En mi centro de salud hay unos trípticos muy caros y bonitos sobre la gripe A. ¿Por qué en vez de gastarse el dinero en algo inútil, algo que no es realmente importante, no hacen trípticos sobre estas enfermedades emergentes (fibro-SFC-SQM) con una prevalencia total del 4% (añadiendo las tres)?" Y esto viniendo de una mujer de un colectivo que tienen problemas inmunológicos y que deberían ser las primeras de estar preocupadas por el contagio de la Gripe A. Pues esta mujer no se había dejado camelar. Hay esperanza...)

Este es un momento clave para concienciar a la gente, para ayudar a la gente a desarrollar un pensamiento crítico. ¿Por qué dicen que la crisis sanitaria es la gripe A cuando no lo es? Esta es la pregunta a repetir una y otra vez y que poco a poco la gente vayan desarrollando su mirada crítica.

Otros temas: Nos intentan meter miedo diciendo que este virus va a mutar. El virus H1N1 es el mismo (la misma cepa) que hubo hasta el año 1957 y que hubo otra vez en 1977. ¿Podría mutar aunque no ha mutado en los 70 años que se conoce? Nada es imposible, sobre todo dado el cambio climático. Y tampoco, como nos empiezan a decir, habrá una "segunda oleada" de Gripe A (con otra mutación). Los virus de la gripe no mutan en una "estación gripal". Este es un truco que van a utilizar la OMS y los gobiernos para meter miedo a la sociedad civil que empieza a ver a través de las mentiras. Dirán "es que ha mutado". Pero no es muy posible.

Referencias: [1] ‘The reemergence was probably an accidental release from a laboratory source in the setting of waning population immunity to H1 and N1 antigens’, Zimmer, Burke, op. cit., p. 282

[2] Zimmer, Bunker, op. cit., p. 279

[3] Doshi, Peter. Calibrated response to emerging infections. BMJ 2009;339:b3471)

O tros temas sobre la "pandemia":

Cómo se hacen las vacunas y quién las hace. El cómo es muy importante. Aparte de la rapidez y chapuzas de la fabricación de las vacunas (hay unas 80 farmacéuticas que van a sacar vacunas - y las venderán las que tienen amiguitos en los gobiernos de cada país), se está utilizando, en las vacunas, el coadyuvante ASO3, que es muy peligroso y el causante del Síndrome de la Guerra del Golfo (enfermedad de la misma familia que el Síndrome de la Fatiga Crónica que desarrollaron muchos soldados estadounidenses al ser vacunados antes de ir a la primera guerra del Golfo, con una nueva vacuna que tenía ASO3 y que les ha causado incapacidad permanente y algunos murieron de parálisis Guillain-Barré).

Artículo sobre que las vacunas causan el Síndrome de la Fatiga Crónica:
http://mcs-america.org/October2009pg24.pdf

Clara Valverde

03 octubre 2009

Manual consenso SFC en At Primaria - CRITERIOS DE NUEVA JERSEY

La creación de este manual comienza con los esfuerzos de la Asociación de Fatiga Crónica de Nueva Jersey (“New Jersey Chronic Fatigue Association”) en asociación con el Ministerio de Salud y Servicios Senior de Nueva Jersey (“New Jersey Department of Health and Senior Services”) para ofrecer al médico de atención primaria un manual que pueda facilitarle y mejorar el cuidado de los pacientes con SFC.

Las siguientes personas proporcionaron un apoyo incalculable en la coordinación, edición, diseño, maquetación y publicación de este documento:
Sondra L. Moylan, RN, MS - Ex Directora de Investigaciones y Educación
Edward J. Moylan, RPh - La Academia de Medicina de Nueva Jersey - Consultor

Elizabeth B. Congdon, RN, MA - Ministerio de Salud y Servicios Senior de Nueva Jersey
Lorraine T. Steefel, RN, MA, MSN - Consultor, Escritor Médico


Finalmente, los editores, personal y el panel de redacción se consideran en deuda con el Dr. Anthony Komaroff, MD, Profesor de Medicina, Harvard Medical School, Brigham & Women's Hospital, y Editor Jefe de Harvard Health Publications, Boston, por revisar el borrador final, hacer importantes observaciones para mejorarlo y ofrecer sugerencias que mejorarán las futuras actualizaciones de este manual.

La primera edición en español, de septiembre de 2008, se debe a la Sra. Cathy van Riel y ha sido revisada científicamente por el Dr. Ferran J. GarcíaFructuoso, reumatólogo y fundador de la Unidad de Fatiga Crónica del Servicio de Reumatología de Clínica CIMA, Barcelona (Spain) y de la Fundación para la Fibromialgia y el Síndrome de Fatiga Crónica (www.fundacionfatiga.org).

Archivos adjuntos:
Descargar este archivo (MANUAL DE CONSENSO SFC FERRAN[1].pdf)MANUAL DE CONSENSO SFC FERRAN[1].pdf[ ]1249 Kb


Fuente: Plataforma Fibromialgia

Investigación sobre el bruxismo. Los efectos demoledores del estrés

El bruxismo o, como define la Real Academia de la Lengua, el rechinamiento de dientes involuntario que se produce durante el sueño, es una de las cuestiones que centran buena parte de la última publicación del odontólogo ilicitano Ambrosio Bermejo y en la que también aborda cuestiones relacionadas con las artropatías temporomandibulares, es decir, las enfermedades relacionadas con la mandíbula y sus articulaciones. "Rechinar los dientes es algo muy común y, de hecho, se produce en el 50 por ciento de los adultos". Bermejo asegura en su publicación, de modo muy gráfico y comprensible, que en el tema del bruxismo incide de forma determinante la genética, "algo sobre lo que poco podemos hacer. Pero al nerviosismo y a la actividad consustancial a una persona se unen el estrés, las alteraciones del sueño, la ingesta de cocaína, algunos antidepresivos o las enfermedades del sistema nervioso central que también pueden provocar el rechinamiento de los dientes y ahí sí podemos incidir. Fundamentalmente podemos actuar en todo en lo relacionado con el estrés, algo de lo que hoy en día vamos más que sobrados".
El prestigioso odontólogo ilicitano, que en diciembre recibirá formalmente el premio Dentista del Año 2008 que le han concedido los 26.000 colegiados españoles como reconocimiento a su carrera y a su aportación en cuestiones científicas y de conocimiento relacionadas con las enfermedades bucales y la mandíbula, asegura que el rechinar de los dientes es una manera de liberar estrés y "por ello es preciso canalizar esta energía a través de la meditación, la relajación y el ejercicio físico".
Problemas de dientes desgastados, aceleración de la piorrea, dolores musculares o artropatías por enfermedad de las articulaciones son las consecuencias más frecuentes de una patología que va en aumento, que tiene su mayor tasa de prevalencia en personas entre los 20 y los 50 años y que cada vez es más frecuente entre los niños "porque la situación del entorno no invita a la relación". De hecho, en uno de los epígrafes del tercer volumen de los "Desórdenes temporomandibulares", Bermejo presenta una imagen de una niña dormida en la que destaca la ausencia de bruxismo a tenor de la separación de los labios, la relajación de la mandíbula, la separación de los dientes y la colocación de la lengua ligeramente apoyada en el paladar.
Respecto a la salud bucal de la población, el doctor Bermejo reconoce que existe una preocupación creciente por el cuidado de la boca y que las caries están decreciendo de manera importante sobre la población infantil, "aunque sólo el 30% de los españoles realiza revisiones dentales periódicas a pesar de que hablamos, comemos y besamos con la boca, un elemento básico en la fisonomía y un soporte estético que es muy importante desde el punto de vista social".
El profesor Ambrosio Bermejo alerta de que una mala salud oral puede desencadenar graves enfermedades como la neumonía, los partos prematuros, la diabetes, las embolias, los infartos y el cáncer. "El cuidado de las enfermedades bucales no deben reducirse sólo a una cuestión estética, sino que en la boca hay focos de infección que pueden tener efectos nefastos. Además, (explica con una elocuente interjección) es muy fácil controlar la boca, ya que ésta que se puede ver fácilmente en el espejo y lo que deberíamos aprender es a autoexploración de vez en cuando para detectar heridas, bultos o cualquier cosa extraña que pueda alertarnos y que nos permita prevenir males mayores".
El estilo de vida saludable (hábitos no tóxicos, alimentación sana, vigilia adecuada, ejercicio físico y relajación), la higiene dental y bucal oportuna y las revisiones periódicas a manos de los profesionales de la Estomatología son los tres ejes fundamentales que pueden garantizar la prevención de las enfermedades de la boca "y sin duda, una boca sana aporta unos besos más dulces", confiesa en tono de broma este reconocido experto en patología bucal.
Ambrosio Bermejo asegura que la "dejadez" de la población en cuanto a mantener un adecuado control de la salud dental y bucal obedece a una razón cultural. "Casi todos los males de la humanidad se deben a la ignorancia y ésta está directamente relacionada con la cultura".

MARÍA JESÚS MORA

Acto en Madrid a favor de afectados de fibromialgia, sindrome de fatiga cronica y sensibilidad química múltiple

¿Estas harta de estar enferma y de ser tratada como una “vaga” o una “cuentista”? ¿No tienes acceso a atención médica para tu enfermedad y tienes que pagar por analíticas y tratamientos? ¿No consigues que te den una baja? ¿Cuándo dices que estás enferma te dicen “Pues tienes buena cara”? ¿Te dicen que tienes “manías” porque te molestan mucho los olores?
Es muy posible que tengas una o más de las nuevas enfermedades como el Síndrome de la Fatiga Crónica (SFC), la fibromialgia (FM) o las Sensibilidades Químicas Múltiples (SQM).
Ven a ver el primer documental en castellano sobre las historias de la gente con el SFC y…a mucho más!


Sábado, 17 de octubre, 18.30 horas, sede de la Fundación ONCE, C/Sebastián Herrera nº 15, MADRID, metro Embajadores.

Presentación del primer documental en castellano sobre el SFC/EM,
Amapola y los Aviones
Producciones Dziga, 2009 (53 minutos)

Presentación del libro “Pues tienes buena cara. Síndrome de la Fatiga Crónica. Una enfermedad Políticamente Incorrecta.
Clara Valverde
MR Ediciones 2009

Con la presencia de la autora.

Se ruega a los asistentes evitar utilizar colonias y aftershaves por respeto a las personas con SQM-SFC/EM-FM.

Organizan: CAS Madrid (www.casmadrid.org) y Liga Síndrome Fatiga Crónica (http://www.ligasfc.org/)
Colabora: Fundación Once

Presentado Clara Valverde

La valoración funcional en el síndrome de fatiga crónica y la fibromialgia

Dr. Joaquim Fernández Solà
Consultor Sénior de Medicina Interna Coordinador de la Unidad de Fatiga Crónica Hospital Clínic. Barcelona Profesor agregado de Medicina, Universidad de Barcelona

Desde la definición conceptual y establecimiento de los criterios clínicos de diagnósticos del síndrome de fatiga crónica (SFC) (CUMBRE G93.3) y de la fibromialgia (FM) (CUMBRE M79.0) ahora ya hace más de 18 años, y con los varios adelantos en el conocimiento clínico y fisiopatológico de estas enfermedades, se vio que no todos los enfermos presentaban un mismo grado de afectación.
Claro está que hay enfermos con FM y/o SFC más graves que otros; también hay oscilaciones de la enfermedad
en un mismo paciente, que hacen que tenga periodos mejores que otros, pero la pregunta es la siguiente:

¿Cómo se debe valorar este grado de afectación?

Debemos tener en cuenta que, aunque el SFC y la FM son dos enfermedades que provienen de una misma disfunción neurológica, afectan predominantemente dos esferas diferentes de la persona:


1) La esfera del DOLOR en la fibromialgia
2) La esfera de la FATIGA física o neurocognitiva en el síndrome de fatiga crónica
Por lo tanto, la valoración de afectación en FM irá dirigida a medir la intensidad y repercusión del DOLOR.
En el SFC se debe valorar la FATIGA en su repercusión tanto a nivel físico como neurocognitivo.


Por otra parte, la valoración funcional es una evaluación que comprende una suma de factores querepercuten sobre el conjunto de la salud y de la calidad de vida de los enfermos y que pueden depender de otras variables diferentes de la enfermedad y también de la presentación de otras dolencias que coexistan con el SFC y la FM.


¿Son mensurables la fatiga y el dolor?
Debemos partir de la base de que todavía no disponemos de marcadores específicos de ninguna de estas dos enfermedades ni tampoco de sus respectivos síntomas (fatiga y dolor).
Por lo tanto, no podemos basar la valoración funcional en un único marcador.
De hecho, en la última reunión de la Sociedad Internacional de SFC (IACFS/ME) de Reno, USA, el pasado marzo de 2009, una de las principales propuestas fue la búsqueda de marcadores (en plural) de esfera clínica, neuropsicológica, bioquímica, inmunológica o endocrinológica que nos permitan ser más objetivos en la valoración de estas enfermedades.
Se ha dicho siempre que el dolor es un síntoma y, por lo tanto, una percepción subjetiva de la persona ante una situación. Se ha intentado medir el dolor con escaleras analógicas (EVA), con técnicas de provocación (la presión que se hace sobre los puntos fibromiálgicos sería un ejemplo), o con aparatos más sofisticados como esfingomanómetros o los algiómetros, que dan un umbral de precipitación del dolor. Más recientemente, las técnicas de resonancia nuclear magnética funcional (RNMf) permiten valorar las áreas del cerebro que se activan ante un estímulo doloroso, pero no se ha llegado a ningún consenso objetivo para su medida, hasta elpunto que la sabiduría popular dice que “no hay dolor bueno”, pero, en todo caso, “no hay mejor dolor que el
dolor que sufren los demás”. Igual sucede con la fatiga.

¿Cómo podemos demostrar que aquella persona que dice que está fatigada no puede hacer más actividad?
Igualmente, se ha intentado hacer pruebas de esfuerzo físico empleando una cinta mecánica, una bicicleta o aparatos similares. Hasta el momento, aun cuando se ha intentado complementar estas técnicas con medidas de consumo de oxígeno (VO2 / VO2 Max) de carga de trabajo total realizado (METs) y compararlo con población control, tampoco, se han podido establecer protocolos fiables de medida. Estas pruebas están sometidas a mucha variabilidad y no todos los enfermos las pueden hacer bien, por eso, las sociedades científicas internacionales tampoco proponen, por el momento, hacer pruebas de esfuerzo para medir la fatiga.
A nivel neurocognitivo se pueden ver esferas afectadas por la fatiga (memoria de retención, la atención y la concentración entre otras) y se puedan también comparar los resultados de un enfermo con la población afectada de similar edad y género. El mejor test de valoración neurocognitiva de la fatiga es el WAISS III. Pero este hecho no deja de ser una aproximación más a un problema complejo. Se ha intentado visualizar las deficiencias de actividad o de perfusión cerebral con pruebas funcionales como la RNMf o la PEDO-scan (tomografía por emisión de positrones). Aun cuando en estas pruebas se encuentran alteraciones del funcionamiento cerebral, de nuevo no son ni específicas para definir la enfermedad ni suficientes como para valorar el grado concreto de afectación.
Y entonces, si no todos los enfermos son iguales, pero no tenemos buenas herramientas de medida que nos permitan diferenciar los casos leves de los más graves...


¿Cómo debemos hacer la valoración funcional en SFC-FM?
Esta pregunta no tiene respuesta única ni consensuada con la comunidad científica a día de hoy. Cada grupo de trabajo ha establecido herramientas que le parecen las más útiles.
Se han propuesto cuestionarios que evalúan el impacto de la fatiga y de la fibromialgia.
Así, existe la Escala de Impacto de la FATIGA (FIS), (Fish JD, 1994) que analiza 40 ítems o la escala de valoración multifuncional de la fatiga (MAF). También se ha generalizado mucho la escala de impacto de la fibromialgia– Fibromialgia Impact Questionaire (FIQ), que puntúa el grado de intensidad del dolor en siete escalas diferentes y un cuestionario.
Pero estos cuestionarios son autoadministrados, con las connotaciones y limitaciones metodológicas que suponen. En nuestra unidad consideramos que al SFC, igual que pasa con otras enfermedades importantes como pueden ser el cáncer, el SIDA, la insuficiencia cardíaca o enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide, lo que cuenta en último término es la CALIDAD DE VIDA DEL ENFERMO.
La calidad de vida del enfermo es el parámetro base de definición del término SALUD por la OLMS, y se puede evaluar con cuestionarios validados. El más conocido es el SF-36 (Medical Outcomes Study Short Form). Valora ocho esferas diferentes que comprenden la función física, rol físico, dolor corporal, salud general, vitalidad, función social, rol emocional y salud mental. Se pueden comparar los valores obtenidos en SFC con la población control no afecta de esta enfermedad o con otras enfermedades. En un número anterior de Biorritmes ya comentábamos que el SFC afecta marcadamentela calidad de vida de los enfermos, y que muchos de estos parámetros están entre el 20-30% de lo que tiene la población control sana. En teoría, una persona sana, tendría que estar al 100% de estos parámetros. Como peor sea el SFC, peor calidad de vida tendrá el enfermo. Y esto se puede trasladar finalmente aplicando este tanto por ciento de afectación de la calidad de vida a una escalera
sencilla de 4 grados sucesivos (I, II, III y IV), hecha con criterio clínico. Esta escala la propusimos desde nuestra Unidad al CATSALUT cuando hicimos el protocolo clínico para la propuesta de Unidad Funcional de SFC al Hospital Clínic el año 2003 y fue aceptada. Debemos decir que no todo el mundo la utiliza, pero se ha generalizado bastante su uso. Se emplea en enfermedades parecidas al SFC como puede ser la artritis reumatoide (Hochberg MC, 1991).
La escala CLÍNIC consiste en dividir a los enfermos con SFC en IV diferentes grados de afectación funcional según la repercusión de su fatiga en la calidad de vida:

GRADO 1: el enfermo presenta fatiga ocasional u oscilante, sin limitación significativa (<>GRADO II: presencia de fatiga persistente, oscilante pero sin mejora, con marcada repercusión (> 50%) en la actividad laboral y también en los AVQ.
GRADO III: fatiga marcada que no permite ni ocasionalmente hacer ningún tipo de actividad laboral y que limita en más de un 80% la autonomía y las AVQ.
GRADO IV: fatiga extrema que precisa la ayuda de otras personas para las actividades personales básicas y que imposibilita la autonomía y las AVQ.

En el grado 1, el enfermo sólo presenta limitación funcional en algunos momentos de su actividad, sobre todo al hacer sobreesfuerzos físicos o mentales. Permite hacer una vida casi normal, con algunas limitaciones. Puede ser necesario adecuar algunos aspectos del puesto de trabajo por evitar sobrecarga o actividades muy prolongadas. No suele precisar bajas laborales.
En el grado II, la fatiga ya se hace persistente. Está presente en todo momento y, ocasionalmente, puede ser intensa. Afecta de manera constante a todas las esferas de actividad global de la persona, que se ven reducidas en más del 50%. Aquí se hace necesario reducir la carga laboral y también las otras actividades intensas de tipo doméstico, personal o lúdico del enfermo. Puede requerir bajas laborales transitorias. En algunos casos puede requerir cambio del puesto de trabajo o reducción de la jornada laboral. A nivel doméstico, puede ser necesaria ayuda para tareas intensas como la limpieza.
En el grado III, la fatiga es intensa en todo momento. No permite hacer ningún tipo de actividad mínimamente intensa ni continuada y afecta todas las esferas de la persona (laboral, doméstica, ocio). El enfermo no puede hacer ni el 20% de la actividad total previa a la enfermedad.
No es compatible con una actividad laboral regular. Sólo se pueden hacer leves actividades en periodos cortos
(habitualmente menos de 30 minutos seguidos).
El grado IV no suele ser una situación fija o permanente. Son periodos de incremento de la actividad de la enfermedad, en que el enfermo no tolera hacer ni tan solo mínimos esfuerzos y suele estar en la cama o en el sofá la mayor parte del día. Incluso precisa ayuda para hacer sus curas personales y pierde parcialmente la autonomía. En esta fase puede haber incluso una situación de dependencia, necesitando el enfermo la ayuda de otras personas. Suele coincidir con brotes de agudización de la enfermedad.
En algunos casos (menos del 1% de los enfermos) se han descrito periodos prolongados de grado IV, de muy difícil manejo médico.
Es importante saber que un enfermo puede tener diferentes momentos evolutivos de la enfermedad, con grado oscilante de afectación por fatiga. Es decir, un grado funcional no tiene porque ser fijo, sino quehabitualmente es oscilante en una escala de más/menos un grado arriba o abajo.


En el caso de la valoración funcional de la fibromialgia, el documento de consenso para esta enfermedad en Catalunya (2002), fijó también 3 grados diferentes de afectación vital:

GRADO 1: AFECTACIÓN VITAL LEVE. Escaleras de valoración clínica con puntuaciones inferiores al 50% y
sin interferencia con la función o el trabajo.
GRADO II. AFECTACIÓN VITAL MODERADA. Escaleras de valoración clínica entre un 50 y 75% e interferencia
con la función o el trabajo (pérdida parcial de actividad).
GRADO III: AFECTACIÓN VITAL GRAVE. Escaleras de valoración clínica superiores al 75% y marcada interferencia con la función o el trabajo (imposibilidad para realizar trabajo o situación de baja laboral por enfermedad).

Un apunte semántico importante: en la valoración funcional no se debe emplear el adjetivo “SEVERO”, puesto que no supone una connotación de intensidad, sino de carácter. Por ejemplo, un padre puede ser severo en la educación de sus hijos, pero una enfermedad no es severa, es leve, moderada o intensa. El adjetivo inglés “severe” en la mayor parte de casos se puede traducir por “grave”.


Otras esferas de afectación: Aparte de la valoración estricta de la fatiga y del dolor, hace falta tener también en cuenta las otras esferas de afectación que esta enfermedad revoca. Estas esferas se pueden medir con pruebas o cuestionarios específicos que se deben utilizar cuando sea relevando alguno de estos aspectos respecto al impacto de la enfermedad:

RRAngustia (STAI)
RRDepresión (HAM-D)
RRActividades de vida cotidiana
RRTrastornos del sueño (Stanford Sleepiness Scale, Polisomnografia)
RRSíntomas cognitivos (memoria, atención, concentración) (WAISS-III)
RRPsicopatología general
RRDisfunción vegetativa (hipotensión, distermia, inestabilidad motora) (test de basculación, intervalo R-R)
RRSensibilidad química y ambiental (QEESI)

EL RESULTADO FINAL de la valoración funcional sería la suma de todos estos factores, teniendo en cuenta también una valoración multicomponente que incluya aspectos de:

RRGrado de actividad y afectación de la enfermedad
RREdad y circunstancias personales del enfermo
RRPresencia de síntomas concomitantes
RRLimitaciones psicofísicas
RRRespuesta al tratamiento
RRGrado de adaptación del enfermo a la situación de enfermedad crónica
RRSituación familiar y social.
Disfunciones familiares y grado de apoyo a la enfermedad
RRSituación socioeconómica
RRExigencias ocupacionales en el trabajo. Posibilidad de readaptación laboral

Finalmente, se debe tener en cuenta que la valoración funcional es una tarea médica, que sirve para el control clínico del enfermo y que no tiene necesariamente una traducción directa en el reconocimiento administrativo o judicial de un determinado grado de invalidez o de minusvalidez. Este punto ha generado a menudo confusión.
Consideramos que se tendría que entender que la tarea médica se limita a nivel clínico al diagnóstico, tratamiento y también a hacer una valoración funcional con pronóstico evolutivo de la enfermedad. Aparte quedarían otras actuaciones médicas específicas como la valoración de la adecuación del puesto de trabajo por
el médico de empresa, la posibilidad de cualquier facultativo de actuar en funciones de peritaje y la valoración del médico forense como asesor médico judicial.
Esperamos que en el futuro, si podemos disponer de marcadores más objetivos de la enfermedad, la valoración funcional se pueda hacer de una manera más precisa que actualmente.

REFERENCIAS:
-Alonso J, Prieto L, Antó JM. The spanish version of the SF-36 Health Survey (the SF-36 health questionnaire):
an instrument for measuring clinical results. Med Clin 1995; 104 (20): 771-776.
- Alijotas J, Alegre J, Fernandez- Sola J, Cots JM, Panisell J, Peri JM, Pujol R. Grupo de Trabajo del síndrome
de fatiga crónica de Catalunya. Documento de consenso cobre el diagnóstico y tratamiento del síndrome de fatiga crónica en Catalunya. Med Clin 2002; 118: 73-76.
-Collado A, Alijotas J, Benito P, Alegre C, Romera M, Sañudo I, Martin R, Peri JM, Cots JM. Documento de
consenso sobre el tratamiento de la fibromialgia en Catalunya. Med Clin 2002; 118: 745-749.
-Fisk JD, Ritvo PG, Ross L, Haase DA, Marrie TJ, Schlech WF. Measuring the functional impact of fatigue: initial
validation of the fatigue impact scale. Clin Infect Dis 1994; S79-S83.

Enlaces relacionados;