Gran asombro nos causa, observar a diario a un significativo número de hombres y mujeres, sobre todo jóvenes, con esa pequeña pero molestosa y antiestética úlcera entre labios y nariz, la cual pareciera convertirse en epidemia por la recurrencia de su afección. A través de un buen amigo me ha llegado un breve pero diligente tratado médico, de uno de los primeros dermatólogos que tuvo nuestro estado, el doctor Antonio Martín Araujo (1905-1983) cuyo escrito mecanografiado de hace 30 años hablaba sobre "una úlcera que causa ampollas en la boca y zonas genitales".
Esto me inspiró a ahondar más en el asunto y en varias enciclopedias médicas, coinciden en señalar que tales lesiones son causadas por el Herpes Simplex I, perteneciente a una familia de virus. Esta afección va asociada a la Varicela, Herpes Simplex II y Herpes Zóster, cuya localización, además de boca y nariz, puede aflorar en los genitales y otras partes del cuerpo, causando erupciones muy dolorosas acompañadas de síntomas parecidos a la gripe, además de fiebre, fatiga, glándulas inflamadas y dolor muscular. El Herpes Zóster, según un dermatólogo consultado, es conocido como "culebrilla" y las personas que lo padecen presentan urticaria dolorosa y es producido por el mismo virus que causa la viruela, el cual aprovecha cualquier baja en el sistema inmunológico para infectar al individuo. Nos consta que este herpes o "culebrilla" es tratado erróneamente en las zonas rurales de nuestro estado, mediante rezos y ritos, tal como la costumbre de dibujar un círculo con lapicero para dejar "encerrada" la parte ulcerada. Este empírico remedio, complica gravemente el estado del paciente y cuando requiere de la asistencia de un médico, el padecimiento se ha vuelto crónico. En el mismo orden de ideas, en esta entidad trujillana, el Herpes Labial es mal curado en forma casera con la aplicación de azul de metileno, yodo, alcohol isopropílico, acetona, ácido bórico y hasta borra de café, los cuales, por inocuos para tales afecciones resultan en vano y sólo contribuyen a agravar el problema, pues la estructura del virus se fortalecerá más y aparecerá con mayor intensidad.
Estadística mundial
No pecamos de alarmistas, pues a través de internet nos llega la información que el Herpes Simple causante de las úlceras en la boca y nariz, cuyo contagio se produce entre la boca y los genitales por la vía del sexo oral promiscuo, es la principal causa de ulceración genital a nivel mundial, llegando a un 20% en la población adulta, siendo muy elevado en África y América Central. Las autoridades sanitarias de nuestro estado, deberían iniciar una investigación para conocer las estadísticas de esta enfermedad e iniciar campañas preventivas para evitar la contaminación, ya que este virus ataca por igual a todos los estratos sociales y con mayor énfasis al sector juvenil.
La medicina molecular no ha encontrado hasta ahora una vacuna y luego que la persona ha sido infectada, el virus permanece de por vida latente en el sistema nervioso. Se puede tratar las infecciones pero no se puede matar el virus, sólo reducir su actividad. Aunque no se recomienda la automedicación, dado que el metabolismo es diferente en todas las personas, el Herpes Simplex y "la culebrilla" son usualmente tratados con un medicamento llamado Acyclor o Acyclovir (Zovirax), Valtrex y Famvir, fármacos de los cuales no debe abusarse, debido a que pueden crear resistencia al virus. No olvidemos que éstos tienen la capacidad de mutar. Lo más recomendable es consultar a un especialista en enfermedades de la piel al nomás aparecer los síntomas, dado que el tratamiento deberá aplicarse dentro de los seis días de comenzada la afección para una mayor efectividad. Las vitaminas C Y E, el zinc y el extracto de Aloe Vera (Carrisyn) son recomendados por la ciencia médica como reforzadores de la respuesta de inmunidad contra los virus de Herpes; sin embargo, reiteramos, la automedicación no es buena consejera y en este sentido, se debe evitar ungüentos y cremas que contengan cortisonas o antibióticos, ya que generan erupciones mayores. De igual manera, debe rehuirse el uso de la luz ultravioleta, incluyendo la luz solar.
La mejor medicina en todo caso, es evitar la promiscuidad sexual.
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