El Concello crea un plan de termalismo urbano destinado a personas mayores

La concejala de Igualdade e Benestar y miembros del
SPA Arrullos de Vilagarcía J.L. Oubiña

La actividad se pone en marcha mediante convenio con el SPA Arrullos de Vilagarcía.

Las personas mayores de 55 años y pensionistas, residentes en Vilagarcía, tendrán la oportunidad de participar en un nuevo programa de termalismo que pone en marcha la Concellería de Igualdade e do Benestar dirigida por la concejala Ana Lorenzo. Se trata de una iniciativa de termalismo social urbano que por primera vez se desarrollará entre los meses de marzo y abril, merced a un convenio con el SPA Arrullos de Vilagarcía.
El número de plazas disponibles en esta primera convocatoria, que se abre como experiencia piloto, es de 30 y el plazo de inscripción comienza este lunes, día 9.
Los usuarios que se inscriban tendrán que pagar un sólo abono de 10 euros en el mes de marzo y otros 10 euros en abril, que les dará derecho a acudir de lunes a jueves, entre las diez de la mañana y las cinco de la tarde, a las instalaciones del SPA que están ubicadas en la avenida Rodrigo de Mendoza.
La presentación de este nuevo programa de termalismo urbano, que no interfiere con las otras actividades ya programadas de termalismo, tuvo lugar ayer en el Auditorio por parte de la concejala Ana Lorenzo y las directivas del SPA Arrullos.
La edil puntualizó que esta actividad es complementaria de los otros programas de termalismo que se desarrollan a lo largo del año a través de otras administraciones y que implican desplazamientos y estancias de varios días en balnearios.
A diferencia de estos planes, el termalismo social urbano ofrecido por el Concello, da la oportunidad a las personas mayores de gozar de todas las actividades de un SPA en el mismo centro de Vilagarcía. Con ello se pretende contribuir a mejorar la calidad de vida del colectivo de mayores del municipio.
El SPA Arrullos del Agua de Vilagarcía lleva algo más de un año en funcionamiento y está equipado con todos los sistemas precisos para tratar problemas circulatorios, de ansiedad y estrés, migrañas, fibromialgia y problemas musculares.
Como cualquier circuito termal, el centro dispone de piscina dinámica con diferentes chorros de agua con los que se masajean desde las plantas de los pies hasta la zona lumbar. Las instalaciones también tienen jacuzzi, sauna finlandesa (calor seco) y turca (calor húmedo), así como duchas bitérmicas y zona de relax. Además los usuarios tendrán derecho a un masaje localizado al mes.
En este programa de termalismo urbano también podrán participar personas que a pesar de no ser pensionistas ni tener 55 años cumplidos, por su situación familiar, precisen de una actividad de respiro familiar. En este último caso será necesario un informe previo de los Servicios Sociais del Concello.
La concejala proyecta repetir la experiencia para el próximo otoño.