Se debe controlar de cerca a los pacientes para determinar si se presentan los efectos secundarios más comunes de los opioides, inclusive la náusea, la somnolencia y el estreñimiento.
El médico debe hablar con el paciente antes de iniciar un tratamiento con opioides.
Por lo general, la náusea y la somnolencia suelen presentarse al comenzar el tratamiento con opioides y tienden a mejorar en pocos días. Otros efectos secundarios de los opioides incluyen el vómito, la dificultad para pensar con claridad, problemas para respirar, la sobredosis gradual y los problemas de la función sexual. Los opioides disminuyen las contracciones musculares y el movimiento muscular del estómago y los intestinos, las heces son duras. La clave para prevenir eficazmente el estreñimiento es asegurarse de que el paciente recibe suficientes líquidos para mantener las heces blandas.
A menos de que haya problemas tales como una obstrucción intestinal o diarrea, generalmente se indica que los pacientes sigan un régimen para prevenir el estreñimiento y se les brinda información sobre el cuidado de la salud intestinal mientras toman opioides.
Los pacientes deben hablar con su médico sobre los efectos secundarios que se vuelvan demasiado molestos o fuertes. Debido a que hay diferencias entre los diversos pacientes en el grado de los efectos secundarios causados por los opioides, se debe informar al médico cuando los efectos secundarios son graves o duraderos. Para reducir los efectos secundarios, el médico puede reducir la dosis del opioide, cambiar de opioide o cambiar la forma de administración del opioide (por ejemplo, intravenosa o inyectada en vez de oral).
Enlaces relacionados;
Edición | fibromialgia.nom.esFuente | www.nci.nih.govl
No hay comentarios:
Publicar un comentario