15 diciembre 2008

Nuevo tratamiento para alteraciones musculares

ARGENTINA.

La aplicación de la toxina botulínica tipo A es presentada por especialistas como una solución para mejorar la calidad de vida de pacientes con alteraciones musculares de origen neurológico, más allá de sus tradicionales aplicaciones estéticas.

La toxina es utilizada en el tratamiento de algunas enfermedades neurológicas desde el año 1989, en especial en los casos de distonías -como blefaroespasmo y la distonía cervical- o en el espasmo hemifacial.

También se utiliza en la espasticidad en adultos y la parálisis cerebral en niños.

Numerosos estudios clínicos destacaron también su uso para combatir la migraña y las enfermedades urológicas como la vejiga hiperactiva. Además, este producto resultó útil para el tratamiento de enfermedades con contracción muscular anormal, que producen diversas dificultades como trastornos en la visión, en la marcha y en el uso de los brazos y las manos, lo cual, claramente, ocasiona la pérdida de habilidades necesarias para la vida cotidiana.

En algunos casos éstos presentan aumento de su masa (en los cuadros de espasticidad), o bien pueden tener contracciones reiteradas (causando distonías de acuerdo a la zona involucrada).

PROCEDIMIENTO

La toxina botulínica se inyecta en los músculos con el objeto de relajarlos, permitiendo que los pacientes recuperen sus funciones.

Se estima que una gran parte de la población padece distonías, pero muchos no lo saben y esto se debe a que este tipo de manifestaciones en ocasiones son subestimadas, y por consiguiente el paciente no recibe el tratamiento adecuado.

Para la distonía focal, que es una afección un grupo muscular específico, que afecta a un grupo limitado de músculos, la aplicación de la toxina botulínica demostró ser la primera opción de tratamiento "seguro y efectivo".

"Los resultados evidencian una mejoría en la calidad de vida del paciente ya que disminuye la frecuencia e intensidad del dolor y una disminución de la incapacidad funcional", comentó la especialista en Neurología Arakaki Tomoko.

ALIVIO DE SINTOMAS

La experta destacó que en los cuadros de distonías generalizadas, "resulta sumamente útil para aliviar los síntomas locales de los grupos musculares más comprometidos".

Además, esta toxina puede ser importante para mejorar la calidad de vida de los pacientes con parálisis cerebral infantil. "La parálisis cerebral puede presentar problemas motores en los miembros y tronco, retraso madurativo, síndromes convulsivos, problemas cognitivos y trastornos del tono muscular. El tratamiento interdisciplinario y la rehabilitación temprana ayudan a lograr importantes progresos en la maduración y la movilidad de los niños", explicó por su parte el médico Ortopedista Infantil Juan Manuel Roncoroni.

1 comentario:

urologia dijo...

Un articulo muy interesante, con datos e información muy certera y corroborada.
La medicina avanza cada vez mas y los tratamientos son cada vez mas centrados en la ciencia moderna.
Tratamientos que buscan aliviar dolores, traumas con apoyo del avance científico moderno.